01 diciembre 2015

Lo que los mass media no cuentan

-El viernes pasado se celebró en la Universidad Carlos III de Madrid un debate entre Albert Rivera y Pablo Iglesias y ayer un debate a tres bandas en el plató del diario El País, por lo que podemos ver el sistema de partidos Español ha pasado desde un bipartidismo moderado a un multipartidismo muy parecido al sistema de partidos italiano.

-En el debate del viernes pudimos ver cómo el candidato Albert Rivera carece de fondo argumental, tras treinta minutos de debate, Rivera se quedó sin argumentos recurriendo a la estrategia retórica de las palabras bonitas puesto que su única propuesta concreta fue la imposición de un contrato único con una justificación fundamentada en argumentos intencionadamente erróneos. El debate yo lo resumiría en la apelación de Iglesias a Rivera "Esto no es una sesión de Coaching, esto es una universidad"

-La guinda del debate fue la pregunta que se le hizo a un Rivera ya desmoronado sobre qué filósofo recomendaría, donde al igual que con el debate que tuvo previamente en el programa de Jordi Évole actuó a rebufo de Iglesias y recomendó a Kant reconociendo posteriormente que no lo había leido. Un desastre en toda regla.

-Tras este debate la opinión pública afirmó categóricamente en la mayoría de los casos que la victoria estaba en poder de Iglesias, mientras que Rivera no solo había perdido sino que había sido humillado.

-En el caso del debate en el país el lunes sucedió lo mismo, Pedro Sánchez logró colocar a Albert Rivera en la derecha mientras que tanto Iglesias como Sanchez propusieron medidas ante un Rivera incapaz de salir de las técnicas retóricas. También se reconoció la derrota de Rivera mientras que Pedro Sánchez logró una victoria estratégica frente a un Pablo Iglesias que dominó el debate.

-Ante estas dos humillaciones públicas de Rivera, ningún medio se ha atrevido a afirmar categóricamente esta derrota mientras que cuando Rivera e Iglesias mantuvieron el debate en el programa de Évole, la moderación de Iglesias le hizo perder y ni un solo medio dejó de comentar la "clara derrota de un Iglesias cansado".

-Cabe destacar que esto no es más que una nueva muestra de la manipulación de los medios que no hace sino justificar todavía más la necesidad de una renovación profunda en el periodismo frente a su corporativismo y su apuesta clara por los intereses del capital.

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